El Teatro Real ha ofrecido en el Lincoln Center de Nueva York un concierto de Gala protagonizado por la Orquesta Titular del Teatro Real, bajo la dirección de Juanjo Mena, en el que ha interpretado un programa compuesto por El amor brujo, de Manuel de Falla; el Concierto para violonchelo, de Antonín Dvořák, y dos obras que reflejan la influencia de Falla en la creación musical del siglo XX: las suites de Daphnis et Chloé, de Maurice Ravel, y la Suite Panambí, del compositor argentino Alberto Ginastera.
Junto a los responsables del Teatro Real, Ignacio García Belenguer (director general) y Borja Ezcurra (director adjunto y director de Patrocinio y Eventos), han asistido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y la delegada del Área de Gobierno de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, quienes han respaldado con su presencia el proyecto cultural del Teatro Real que, por segundo año consecutivo, visita la ciudad norteamericana para afianzar su compromiso con la divulgación de la cultura de España en el mundo.
La Gala ha contado también con la presencia de Helena Revoredo, vicepresidenta del Patronato y del Consejo Internacional del Teatro Real; Marta Álvarez, presidenta de El Corte Inglés; la diseñadora Carolina Herrera; y la mezzosoprano norteamericana Joyce DiDonato, entre otros.
Además de la Orquesta Titular del Teatro Real, han tenido especial protagonismo la cantaora Esperanza Fernández, en su participación en El amor brujo, y el violonchelista Pablo Ferrández, solista en el bellísimo concierto de Dvořák, quien, al finalizar la primera parte del concierto ha ofrecido el bis El cant dels ocells, canción tradicional catalana. La orquesta marcó el acento español al interpretar, fuera de programa, El bateo e Intermedio de Goyescas, de Enrique Granados.